Estoy en buena forma, pero después de 10 años sentado frente al escritorio más de 10 horas al día, mi postura se deterioró tanto que empezó a causarme dolor, incomodidad y vergüenza. Se volvió algo natural encorvarme sin darme cuenta. Esta falta de conciencia me afectaba incluso frente a otros.

Para mí, la mala postura no era falta de fuerza, sino un mal hábito de muchos años. Este dispositivo realmente me ayudó a corregir ese hábito. Lo dejo todo el día en modo de entrenamiento, y cuando me encorvo, me avisa con una pequeña vibración para enderezarme. Justo lo que necesitaba.

El primer día me sorprendí al notar cuánto me encorvaba. Con el tiempo se volvió más fácil mantener una buena postura, y ahora soy mucho más consciente. Estoy orgulloso de decir que mi postura ha mejorado mucho con este dispositivo. La aplicación es muy intuitiva y el producto está muy bien diseñado. Me cambió la vida.